La historia de Ramón Lago podía ser la de tantos estudiantes que invierten años en su tesis doctoral y se acaban rindiendo. Pero su caso es diferente. Abandonó el ámbito académico y decidió hacer realidad su idea. Fundó en el 2014 RSP y desde entonces ha sumado éxitos progresivos. El primero fue ser finalista en el concurso Vía Vigo de Zona Franca y el más reciente, que sitúa su marca en el contexto europeo, un contrato con una multinacional holandesa para distribuir 400 máquinas por Europa en dos años. Su objetivo para el año 2016 era comercializar 168 en España.
